
Los menores extranjeros no acompañados también tienen nombre. Son personas con el mismo derecho a soñar con una vida con oportunidades, derechos y labrada con sus propias manos. En esta ocasión, con sus propios pies. Este es el caso de Rabii Merouani, futbolista del UP Langreo que protagoniza una historia de superación encomiable con el balón como eje central del relato.
Rabii llegó a España cuando era menor de edad. Vivía en un centro de acogida en Castilla-La Mancha, donde le daban un buen trato humano que contrarrestaba con su situación compleja. El actual futbolista del UP Langreo, además, no podía jugar a fútbol de forma federada, ya que la FIFA prohíbe a menores jugar partidos oficiales en un país diferente al de nacimiento.

La calidad de Rabii Merouani destacaba sobre sus compañeros y amigos. El marroquí destacaba por encima del resto, se adueñaba del balón y derrochaba talento por los cuatro costados. Aquellas peripecias fueron visualizadas por un ojeador de InterSoccer Academy, que no dudó en seguirle la pista. Al cumplir 18 años y verse en la obligación de salir del centro de acogida, Rabii se trasladó a la residencia de InterSoccer Academy como becado.
En la academia recibió un genial trato que se tradujo después en un convenio de colaboración para ayudar a más futbolistas como él (menores extranjeros no acompañados). En la 18/19, una vez cumplió la mayoría de edad, recaló en el Juvenil Nacional del AD Alcobendas, donde demostró que su talento nato debía pulirse en base a una formación que no había obtenido previamente.
Una temporada después, ya como sénior, pasó a militar en el AC InterSoccer Madrid de Primera Regional, donde no pudo completar la campaña completa a causa de la pandemia, pero ya ofrecía detalles de que su calidad pertenecía a una mayor categoría. En la 20/21, la InterSoccer Academy se mudó a Asturias y el UP Langreo, fiel a su idiosincrasia de formas jóvenes promesas, le adquirió para su equipo de Preferente.

Tras la suspensión de las competiciones regionales en Asturias, Ángel Rodríguez, entrenador del primer equipo del UP Langreo (Segunda B), decide contar con él para un entrenamiento. Tras ver su desparpajo, decidió incorporarle a la dinámica de su elenco para el resto de la temporada. El trabajo constante le llevó a debutar ante el CD Numancia en la jornada 17 de Segunda B.
Rabii ha podido jugar ante el Compostela en el Vero Boquete, contra el Racing de Ferrol en casa y, lo más importante, ante el Deportivo de la Coruña en todo un estadio de Primera División como Riazor. Apenas tres años y medio antes, competía ante sus compañeros menores extranjeros no acompañados en una cancha bacheada de balonmano en un centro de acogida. Esta es la historia de superación de Rabii Merouani, el ejemplo de que los sueños se pueden cumplir.